La UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) se fundó el 16 de Noviembre de 1945, es un organismo especializado de las Naciones Unidas. Desempeña cinco funciones principales, que son las siguientes:
1. Estudios prospectivos: es decir, las formas de educación, ciencia, cultura y comunicación para el mundo del mañana
2. El adelanto, la transferencia y el intercambio de los conocimientos, basados primordialmente en la investigación, la capacitación y la enseñanza
3. Actividad normativa, mediante la preparación y aprobación de instrumentos internacionales y recomendaciones estatutarias.
4. Conocimientos especializados, que se transmiten a través de la "cooperación técnica" a los Estados Miembros para que elaboren sus proyectos y políticas de desarrollo.
5. Intercambio de información especializada .Su principal objetivo es contribuir a la consolidación de la paz, la erradicación de la pobreza, el desarrollo sostenible y el dialogo intercultural mediante la educación, las ciencias, la comunicación y la información1.
Jacques Delors (París, 1925) político francés que fue presidente de la Comisión Europea entre 1985 y 1995. Tras estudiar derecho y economía trabajó para la Administración de la Quinta República desde su instauración por De Gaulle (1959). En 1973 se convirtió en consejero del Banco de Francia y en catedrático de Gestión de Empresas de la Universidad de París; y al año siguiente ingresó en el Partido Socialista Francés. Su brillante carrera política le condujo a ser diputado en el Parlamento Europeo (1979-84) y ministro de Economía y Finanzas en el primer gobierno de François Mitterrand (1981-84).
Catapultado en 1985 a la presidencia de la Comisión Europea, Delors desempeñó el cargo como un gestor eficaz y un político entusiasta, impulsando con su talante negociador y realista la causa de la unidad europea. Durante su mandato al frente de la institución (1985-1994) amplió la Comunidad negociando el ingreso de España y Portugal (1985) y Austria, Finlandia y Suecia (1994); y dinamizó la marcha hacia la integración de los países miembros con la firma del Acta Única (1986) y del Tratado de Maastricht que hizo nacer la Unión Europea (1992).
El Informe Delors sobre la integración económica y monetaria, que elaboró en 1989, es la base sobre la que se apoya tan complicado proceso hasta nuestros días; también se debe a su inspiración el Libro Blanco sobre el Empleo en Europa (1993), que diseñó una ambiciosa política socialdemócrata de inversiones en infraestructuras y nuevas tecnologías2.
En el año 1997 la UNESCO encargó a Jacques Delors un estudio sobre la perspectiva de la educación en el mundo de cara al siglo XX. La influencia de dicho informe (sobre todo en la educación occidental) tuvo grandes alcances, reorientando los objetivos del modelo educativo hacia el desarrollo de nuevas capacidades individuales señaladas como esenciales para el nuevo escenario mundial del siglo XX.
La misión era la de realizar un trabajo de estudio y reflexión sobre los desafíos a los que deberá hacer frente la educación y presentar sugerencias y recomendaciones en un informe que pueda servir de programa de renovación y acción a los responsables oficiales del mas alto nivel3.
2. La educación encierra un tesoro

El Informe Delors hace referencia a la educación en todas sus dimensiones. La forma en que afecta de
La política de educación debe diversificarse sin que constituya un factor de exclusión, impulsar la combinación de integración y el respeto de los derechos individuales. En las escuelas debe iniciarse la
educación para la ciudadanía consciente y activa. De esa manera enseñar tanto a niños como a adultos a seleccionar informaciones e interpretarlas para situar los acontecimientos en una historia global.
Se propone una educación adaptable al desarrollo tecnológico y laboral y respetuoso de la naturaleza y ritmos del individuo. Se incita al trabajo en equipo, a la iniciativa, a planificaciones realistas en función de los recursos, al autoempleo y al espíritu de empresa.
Queda clara la intención de elaboración de nuevos programas pedagógicos en sistemas educativos cuya prioridad es la adquisición de conocimientos, en detrimento de otras formas de aprendizaje tales como los denominados cuatro pilares de la educación a lo largo de la vida, que son aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a vivir juntos y aprender a ser.
Respecto a la educación a lo largo de la vida no sólo distingue entre educación básica y educación permanente sino que añade el término de sociedad educativa, en la que todo individuo puede aprender y desarrollar sus capacidades. Trata desde el perfeccionamiento y promoción profesional de adultos, la posibilidad de brindar una segunda o tercera oportunidad educativa hasta la posibilidad de satisfacer la sed de conocimientos.
Sobre la orientación educativa se hace hincapié en el fortalecimiento de la educación básica, el acercamiento al mundo de la ciencia, el fortalecimiento de la relación alumno-docente, la posibilidad de acceso a la educación secundaria a adultos, la flexibilidad de oportunidades una vez hecha la selectividad, la diversidad de la enseñanza superior, ya sea en estudios universitarios o especializados, barajando nuevas formas de certificación de éstos últimos.
El trabajo del maestro debe ser dotado de la autoridad necesaria y de los adecuados medios de trabajo. Así mismo los maestros deben actualizar continuamente sus conocimientos y competencias. Es muy importante el trabajo en equipo para enriquecer y complementar la labor educativa entre maestros.
La Comisión pide a las autoridades políticas que se favorezca el debate para poder llegar a un consenso democrático sobre las reformas educativas, considerando para ello, la descentralización administrativa y la autonomía de establecimientos, motivo de desarrollo e innovación. Insta a tener en cuenta las limitaciones financieras de los países, fomentando así tanto la educación pública como privada, sin olvidar que, la financiación pública de la educación básica debe ser una prioridad en todos los sistemas políticos.
Destaca la relevancia de la formación continuada y para ello propone el concepto “crédito-tiempo” para la educación así como el importante papel de la enseñanza a distancia y del uso de las nuevas tecnologías para conseguir dicho objetivo4.
Enlazamos un vídeo para introducir el siguiente tema: Los Cuatro pilares de la educación:
http://vimeo.com/54815399
El video es la explicación del significado del logo de una revista de educación 'Global Education Magazine' y sintetiza de manera muy armoniosa y representativa los cuatro pilares de la educación, describiéndolos con palabras por cada pilar:
Aprender a aprender: descubrir, entender, expandir y explorar.
Aprender a hacer: trabajo, influencia, lograr y esforzarse.
Aprender a vivir juntos: cooperar, desarrollar, ayudar y colaborar.
Aprender a ser: crecimiento, autonomía, responsabilidad y evolución.
Finalmente se unen todas las partes del logo y forman una circunferencia completa, representando la educación.
3. Los cuatro pilares de la educación
El nuevo concepto de educación que se plantea en el s. XXI trae consigo una doble exigencia. En primer lugar, transmitir de forma masiva y eficaz un elevado volumen conocimientos teóricos y técnicos
evolutivos adaptados a la civilización cognoscitiva. En segundo lugar, hallar el afán por continuar adquiriendo conocimientos del entorno que le rodea.
Con esta nueva definición, ya no basta que cada individuo adquiera un monto de conocimientos durante el comienzo de su vida, sino que debería aprovechar y utilizar cada oportunidad que le aparezca a lo largo de su vida para actualizar, profundizar y enriquecer los primeros saberes adquiridos ya que el mundo que le rodea está en continuo movimiento.

Para poder cumplir las nuevas exigencias otorgadas a la educación, ésta se estructura en los cuatro pilares del conocimiento: aprender a conocer; aprender a hacer; aprender a vivir juntos; y, aprender a ser.
A pesar de que la comisión considera que cualquier sistema de enseñanza estructurado debería de darle la misma importancia a cada uno de los pilares, con el fin de proporcionar al ser humano valores de calidad en cuanto a persona y miembro de la sociedad, experiencia global y durabilidad de los planos cognoscitivos y prácticos durante toda su vida.
Por lo tanto, esta nueva concepción más amplia de la educación debería dar lugar a que cada persona descubra, despierte e incremente sus posibilidades creativas, actualizando los conocimientos previos adquiridos. De modo que, la educación pase de ser considerada como una vía obligada para obtener ciertos conocimientos a considerar su plenitud plena en cuanto a saber, realizarse como persona, etc., es decir, aprender a ser.
Aprender a conocer
Este tipo de aprendizaje tiende a dominar los instrumentos mismos del saber. Se considera medio y finalidad de la vida humana y su fin es aprender a comprender, a conocer y a descubrir el mundo que le rodea
Sin embargo, al ser el conocimiento múltiple e infinitamente evolutivo, resulta utópico conocerlo todo.
Aprender a conocerse implica aprender a aprender mediante la ejercitación de la memoria, la atención y el pensamiento. Es muy bueno habituar a los niños desde pequeños a concentrar la atención en las cosas y las personas.
El ejercicio de la memoria es una manera preventiva de las informaciones momentáneas de los medios de comunicación (fuente de inspiración de los niños). Se debe ser selectivo en la elección de información, y la ejercitación de la memoria asociativa.
Finalmente, el pensamiento del niño es iniciado por los padres, y continuado por el educador. Ambos deben conseguir la conjunción de lo abstracto con lo concreto.
El proceso de adquisición de saberes no concluye nunca, y se debe ampliar con las experiencias ocurridas a lo largo de su vida.
Aprender a hacer
Aprender a conocer y aprender a hacer son términos prácticamente iguales. La diferencia es que aprender a hacer está dirigido a la formación profesional.
De la noción de calificación a la competencia
Las dimensiones cognitivas e informativa en los sistemas de producción industrial vuelve caduca la noción de calificación profesional, entre operarios y técnicos y tiende a realizar la competencia personal. El proceso técnico modifica las calificaciones de los nuevos procesos de producción.
Esto junto con el empeño del personal del trabajador, es considerado agente de cambio. Por lo que se puede observar cómo se combina los conocimientos teóricos y prácticos con las cualidades subjetivas, innatas o adquiridas del trabajador.
Esta actitud muestra la relación que debe tener la educación y los diversos aspectos de aprendizaje.
La desmateralización del trabajo y las actividades de servicios en el sector asalariado
Las repercusiones de la desmaterialización de las economías avanzadas en el aprendizaje se ponen de manifiesto cuando se observa la evolución tanto cuantitativa como cualitativa de los servicios. La mayoría de estos servicios se definen según la relación interpersonal que tienen.
El problema viene también generado por los países en desarrollo.
El trabajo en la economía no estructurada
En las economías en desarrollo, en la cual predomina la actividad no asalariada, la naturaleza del trabajo es distinta. Los conocimientos técnicos empleados suelen ser de origen tradicional y la función del aprendizaje no se limita solo al trabajo, sino que pretende satisfacer el objetivo más amplio de una participación en el desarrollo dentro de los sectores estructurados o no.
Aprender a vivir juntos, aprender a vivir con los demás
Este pilar del aprendizaje constituye uno de las principales iniciativas de la educación contemporánea. Es muy habitual ver como la violencia interrumpe la esperanza que se había depositado en el progreso.
El descubrimiento del otro
La educación persigue una doble misión. Por un lado, enseñar la diversidad de la especie humana. Por otro lado, contribuir en la toma de conciencia de las semejanzas y la dependencia entre los mismos.
El descubrimiento del otro pasa por el descubrimiento de uno mismo. El objetivo es desarrollar en el niño y el adolescente una visión íntegra del mundo y la educación.
Tender hacia objetivos comunes
Hablamos de tender hacia objetivos comunes cuando perseguimos trabajar mancomunadamente en proyectos motivadores que permitan escapar de la rutina. Esto hace que disminuyan e incluso desaparezcan las diferencias entre los individuos.
Por lo tanto, la educación escolar debe reservar tiempo y ocasiones suficientes en sus programas para iniciar desde muy temprano a los jóvenes en proyectos de cooperación en el marco de diversas actividades.
Aprender a ser
Y en este último pilar, la educación debe contribuir al desarrollo global de la persona, es decir, al desarrollo de cuerpo y mente, inteligencia, sensibilidad, sentido estético y responsabilidad individual. Los seres humanos deben estar en condiciones de poseer un pensamiento autónomo y crítico, el cual le permita elaborar un juicio propio para determinar cómo actuar en diferentes circunstancias de la vida.
Finalmente, teniendo en cuenta que vivimos en un mundo en constante movimiento, la imaginación y la creatividad deberían de ser uno de los principales motores para la innovación tanto social como económica.
4. La educación a lo largo de la vida
El concepto de educación a lo largo de la vida es la clave para entrar en el siglo XXI. Este fenómeno tiene diversas causas. La división tradicional de la existencia en periodos claramente separados en la infancia y la juventud, dedicadas a la educación escolar; la edad adulta, consagrada a la actividad profesional, y el periodo de la jubilación ha dejado de corresponder a las realidades de la vida contemporánea y se ajusta aún menos a los imperativos del futuro.
Por otra parte, el acortamiento del periodo de actividad profesional, la disminución del volumen total de horas de trabajo remuneradas y la prolongación de la vida después de la jubilación aumentan el tiempo disponible para otras actividades.
Paralelamente, la propia educación está en plena mutación; en todos los ámbitos se observa una multiplicación de las posibilidades de aprendizaje que ofrece la sociedad fuera del ámbito escolar, y la noción de especialización en el sentido tradicional está siendo reemplazada en muchos sectores modernos de actividad por las de competencia evolutiva y adaptabilidad.
La educación permanente no puede ya definirse por referencia a un periodo particular de la vida por ejemplo, la educación de adultos, por contraposición a la educación de los jóvenes o una finalidad demasiado circunscrita, cuando se distingue, por ejemplo, la formación profesional de la formación general.
El adelanto científico y tecnológico y la transformación del proceso de producción obligan al individuo a actualizar sus conocimientos adquiridos durante su formación inicial. La educación a lo largo de la vida va aún más lejos, debe dar a cada individuo la capacidad de elegir su destino en un mundo en continuo cambio. Esta rápida modernización, aunque aún afecta a una parte del mundo, sin duda tenderá a generalizarse y reflejarse en una reorganización de las fases de la vida. La educación a lo largo de la vida ofrece los medios para alcanzar un equilibrio entre el trabajo y el aprendizaje.
La desigualdad de oportunidades educativas entre países desarrollados y países en desarrollo en una problemática a la que la educación a lo largo de la vida puede hacer frente, no sólo con la escolarización de poblaciones desfavorecidas, sino también con la captación de jóvenes que han abandonado prematuramente los estudios estableciendo modalidades de educación flexible.
La educación a lo largo de la vida representa para el ser humano una opción pluridimensional. Tomar conciencia de sí mismo y de su entorno, la repetición o imitación de gestos y prácticas compatibilizado con la apropiación particular y creación personal, la combinación de conocimiento formal y no formal, el desarrollo de aptitudes innatas y el aprendizaje mediante la experiencia son algunas de las dimensiones de esta educación propuesta. La aplicación de esta educación pluridimensional y escalonada a lo largo de toda la vida es necesaria pero a la vez compleja y asimilando el hecho de que la mentalidad humana tiende a ser mundial surge la necesidad de combinar lo universal y lo singular, a fin de que todos reciban los beneficios de diversidad del patrimonio cultural mundial y las características específicas de su propia historia.
La disminución del tiempo empleado en el trabajo, referencia principal de la mayoría de los individuos por diversos motivos reales como la demora de los jóvenes en la inclusión al mundo laboral, el adelanto de la edad de jubilación, alargamiento de duración anual de vacaciones, reducción de la semana de trabajo, aumento de contratos a jornada parcial, trabajo de duración determinada o precario y aumento de trabajo por cuenta propia genera un aumento de tiempo libre que debe ir acompañado por el tiempo dedicado a la educación. Los espacios educativos y las ocasiones de aprendizaje tienden a multiplicarse y al diversificase el entorno no educativo se rebasan los sistemas educativos escolares y de enseñanza no formal.
La población adulta que estudia aumenta dos millones desde 2007
Que los jóvenes están mirando a la educación en estos tiempos de desempleo masivo ya lo decía el rapidísimo descenso del
abandono escolar temprano en España: del 31,2% en 2009 al 26,5% en 2011. Pero la Encuesta de Actividades de Aprendizaje de la Población Adulta que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística (INE) dice que el resto de la población también lo está haciendo, al menos, mucho más que antes de la crisis. Casi 10 millones de personas de 25 a 64 años (el 37,7%) participaron el año pasado en actividades de formación, tanto formal (las que conducen a un título oficial) como no formal (reciclaje, preparación laboral). Esa cifra supone dos millones de personas más que en 2007, cuando el INE hizo una encuesta similar: entonces era el 30,9%.
Desde luego no son unos porcentajes muy altos si se comparan con los de países nórdicos como Suecia, Finlandia o Noruega, y con Reino Unido o Suiza, donde al menos la mitad de los adultos participa cada año en algún tipo de actividad formativa. Sin embargo, el crecimiento acerca a España a la media de la Unión Europea, al menos, a la de antes de la crisis: 34,9% en 2007. Entonces, España estaba en el furgón de cola, pero aun por debajo estaban Portugal (26,4%), Italia (22,2%), Polonia (21,8%) o Grecia (14,5%). Es más que previsible que estas cifras hayan aumentado durante el periodo de crisis en muchos otros países, como ha ocurrido en España, donde el porcentaje de adultos que no estudia ni tiene ninguna intención de hacerlo ha caído del 61% en 2007 al 52% en 2011. Entre los que efectivamente se están formando, los mayores aumentos se han dado en los tramos de edad de 45 a 54 años (hay estudiando 794.000 personas más, pues han pasado de 27% al 36,1%), y de 25 a 34 años (del 39,6% al 47,9%).
La profesora de Economía y vicerrectora de la Universidad de Castilla-La Mancha Fátima Guadamillas explica que la “oferta de enseñanza no formal ha mejorado mucho” en los últimos años. Además, señala que la crisis influye de forma directa, pero también indirecta, es decir, por la presión de seguir formándose que pesa también sobre los que conservan el empleo; hay mucha competencia y quién sabe qué puede pasar. El 44% de los adultos con trabajo está estudiando algún título o curso, mientras que hace lo mismo el 34% de los parados.
Asimismo, los mayores crecimientos registrados en la educación no formal y, por encima de los demás, se han dado en estudios relacionados con ciencias sociales, enseñanzas comerciales y derecho, seguidos de los que tienen que ver con la salud y los servicios sociales. El gasto medio de los adultos de 25 a 64 años en estos cursos ha sido de 1.089 euros (en 2007 eran 781). En la parte de la educación formal, hay cerca de 150.000 alumnos más de 35 a 44 años que en 2007. Estudian carreras universitarias y equivalentes, seguidas de títulos de formación profesional de grado medio.
Las cifras de la encuesta del INE también apuntan a que los españoles cada vez prefieren más un aprendizaje dirigido (bien sea presencial o por Internet) antes que ser autodidactas. Esta categoría se mide como aprendizaje informal, y la cifra de adultos que lo practican ha pasado de 7,1 millones en 2007 a 4,7 millones en 2011. La encuesta los define como aquellos conocimientos que se adquieren “de forma menos organizada y estructurada que la educación no formal y sin acudir a ninguna institución educativa”. “Las lenguas extranjeras han sido la principal materia de estudio, seguida de la informática a nivel de usuario y las artes y humanidades”, añade la nota de prensa.
En la edición de 2011 de la encuesta, el INE ha añadido, a diferencia de la de 2007, el grupo de edad que va de los 18 a los 24 años, un segmento cuyos usos y costumbres educativos está mucho más controlado, pues corresponde al abandono escolar temprano. Este se fija en el porcentaje de jóvenes de esa edad que han dejado de estudiar antes de conseguir, al menos, el título de bachillerato o el de FP. Sin embargo, la encuesta sí da algunas pinceladas para completar ese mapa. Por ejemplo, que la inmensa mayoría de los jóvenes de esa edad que no estudian (el 29,9%) son precisamente esos que abandonaron prematuramente las aulas (el 26,5%). Además, si cruzamos todas esas cifras con la de ninis —el 23,1% de los españoles de 18 a 24 años que ni estudian ni trabajan—, podremos decir que la mayoría de los jóvenes que no se está formando tampoco tiene empleo y que la mayor parte de ellos abandonaron los libros de forma prematura.5
Por otra parte, durante toda la vida el individuo aprende en el espacio social al que pertenece que varía entre individuos y a lo largo de la vida de cada uno de éstos. La comunidad a la que pertenece cada individuo es un poderoso vector de educación, ya sea por el aprendizaje de la cooperación y la solidaridad o el aprendizaje del civismo. La comunidad debe asumir la responsabilidad de la educación bien con un dialogo constante con la institución escolar, bien impartiendo directamente parte de esa educación en el marco de prácticas extraescolares.
El mundo laboral es un importante espacio educativo por ser el ámbito en que se adquieren un conjunto de conocimientos técnicos. Es necesario pues, reconocer el valor formador del trabajo, especialmente en el ámbito educativo. Este reconocimiento desemboca en la consideración de que se tome en cuenta por parte de la universidad la experiencia profesional. En ese sentido podrían establecerse conexiones entre la universidad y la vida profesional y así ayudar a los que quieren ampliar sus conocimientos al tiempo que completan su formación. Conviene, por ese motivo ampliar las relaciones entre el sistema educativo y las empresas. De esa manera los jóvenes pueden alternar conocimientos teóricos y prácticos, concienciarse de sus limitaciones y oportunidades de la vida profesional y propiciar el acceso a la madurez, poderos factor de inserción laboral.
Estados Unidos y Uruguay buscan proyectos educativos y de desarrollo de la fuerza laboral
Estados Unidos y Uruguay coincidieron, a través de un memorándum de entendimiento, Que una fuerza laboral mejor capacitada y educada puede llevar a una mayor prosperidad económica y más puestos de trabajo sostenibles.
Dicho acuerdo fue firmado por el Subsecretario de Comercio para el Comercio Internacional Francisco Sánchez y el Ministro de Industria, Energía y Minería Roberto Kreimerman, en el marco del Foro de Competitividad de las Américas que se está celebrado en la ciudad de Atlanta.
El mismo ofrece un marco para la continua expansión de programas, a fin de fomentar la capacidad comercial internacional y promover los intereses mutuos en materia de educación y desarrollo laboral.
“Las iniciativas previstas en el Memorando de Intención mejorarán las relaciones comerciales entre los Estados Unidos y Uruguay”, expresó Sánchez. Agregó, asimismo que “juntos estamos ayudando a educar a los empresarios que crean puestos de trabajo sostenibles que pueden hacer a ambos países más competitivos en el mercado cada vez más global.”
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay trabajará con la Administración de Comercio Internacional del Departamento de Comercio para ampliar varias iniciativas en marcha dentro del Memorando de Intención. Estas incluyen un acuerdo entre la Escuela de Negocios Robert H. Smith de la Universidad de Maryland y la Universidad de Montevideo para desarrollar un intercambio de estudios de mercado, un intercambio de ética empresarial entre la Universidad DePaul y la Universidad de la República y la Universidad ORT, y un intercambio de investigación centrado en el impacto del programa de Uruguay “Una computadora por niño.”
“El acuerdo de hoy es un excelente ejemplo de cómo dos países pueden trabajar juntos para cerrar la brecha entre lo que se necesita para crear el crecimiento económico y la actual fuerza laboral”, dijo Sánchez.
Uruguay es un importante socio estratégico para los Estados Unidos en América Latina, especialmente en industrias clave como la educación, las energías renovables y tecnologías de la información. En 2009, Estados Unidos exportó más de 744 millones dólares en bienes y servicios a Uruguay6.
Otros ejemplos de educación a lo largo de la vida son las instituciones culturales, como los museos, el cine y las bibliotecas, al alcance de la mano de estudiantes que quieren reforzar su formación y enriquecimiento cultural. Por otra parte tenemos los medios de comunicación que, debido a su contenido en su gran mayoría de entretenimiento y con escaso contenido cultural tiene, a su vez una gran capacidad de atracción. Es importante canalizar la parte positiva de los medios de comunicación (en especial la televisión) y emplearla para la educación, generando canales de contenido educativo, como ya se hace en Japón, donde un 90% de las escuelas utilizan la televisión con fines educativos.
Los medios de comunicación como herramientas de aprendizaje
Diversos estudios han demostrado que el abuso de soportes audiovisuales configura un estilo de aprendizaje pasivo, lo que motiva que los niños sean menos creativos e imaginativos. Este consumo, además, no favorece la comunicación ni la curiosidad por aprender y sumerge al niño en un mundo de ficción confuso que puede resultar peligroso, ya que, hasta los seis o siete años, el pensamiento infantil no diferencia adecuadamente la realidad de la ficción.
Por otro lado, estudios como el realizado por la fundación norteamericana Kaiser alertan de problemas en la lectura y la escritura en niños menores de seis años, relacionados con un alto consumo de televisión. También se ha demostrado que existe una marcada conexión entre pasar muchas horas delante del ordenador o de la televisión y la obesidad infantil.
¿Qué ven los niños?
Un estudio reciente calcula que los niños ven más de 1.000 actos de violencia al año. Estos actos incluyen frecuentemente robos, engaños, venganzas, peleas, envidias, infidelidad, homicidios, etcétera. Los niños, a través de los modelos que observan en la televisión y en los videojuegos, pueden entender erróneamente que la violencia es una manera aceptable de resolver los problemas. Está comprobado que los niños que consumen demasiada violencia acaban desarrollando una mayor facilidad para mostrarse agresivos hacia los demás.
Generalmente, se presenta en los medios a personajes ficticios como si se tratara de seres reales: se les muestra de modo idealizado, con todas las necesidades materiales y emocionales satisfechas. Esto puede conducir a creencias falsas sobre el valor de las personas y de la vida real.
¿Cómo utilizar los medios de comunicación educativamente?
• En primer lugar, se deben fomentar en los niños las actividades de juego al aire libre, deportivas y de interacción con sus iguales, como medio de descanso. Es conveniente animar a los padres a encontrar tiempo para conversar y jugar con sus hijos, mejorando de este modo la comunicación. Ésta es la mejor inversión que se puede realizar, ya que así serán ellos, los padres, los modelos de sus hijos, sin ser sustituidos por otros referentes de la televisión o los videojuegos.
• Desde las escuelas, se deberían realizar campañas educativas orientadas al correcto uso de los medios para convertirlos en una herramienta de aprendizaje. Es necesario que los educadores expliquen las consecuencias que tienen las conductas planteadas en los medios. La realización de campañas educativas o la incorporación en el aula de ejercicios y trabajos que impliquen un contacto directo con los medios son un necesario punto de partida para avanzar en esta línea. Por ejemplo, son interesantes actividades como la realización de trabajos en grupo que versen sobre las temáticas y los modelos de persona que aparecen en la televisión, la lectura conjunta de periódicos y boletines electrónicos, la organización de chats entre colegios con el objetivo de debatir algún tema estudiado o el uso de programas on line para complementar el aprendizaje de un idioma o resolver problemas de lógica, entre otras múltiples posibilidades.
• A la hora de consumir contenidos televisivos o de Internet, se deben elegir aquellos que incluyan personajes que sirvan de modelos positivos, que transmitan valores y emociones que el cerebro de un niño sea capaz de procesar y comprender. Por ejemplo, se puede promover el uso de Internet para buscar información de interés educativo o ver la televisión en compañía familiar.
• Conviene no perder de vista que la televisión no es un simple entretenimiento. En este sentido, además, es importante promover que los niños se mantengan ocupados desde pequeños en actividades diversas que desarrollen su creatividad: la lectura, el dibujo, los deportes o la música.
• Finalmente, hay que poner límites más precisos en el uso de la televisión e Internet, cuidando especialmente las franjas horarias. Según un estudio elaborado por SOFRES, los niños de entre 4 y 13 años ven la tele mayoritariamente entre las 18.30 y las 23.00 horas, y durante el mediodía.
En definitiva, en nuestras manos está el realizar un buen uso de estos medios para promover el sano crecimiento intelectual, moral y emocional de nuestros pequeños. La formación y la información nos pueden y nos deben ayudar a aprender y a ser más libres7.
La educación a lo largo de la vida es, en definitiva la compatibilización entre el saber teórico y el saber práctico, adquirido bien a través de prácticas educativas tradicionales, bien a través de formas educativas alternativas. Independientemente de la necesidad de actualizar conocimientos profesionales el concepto inicial de educación permanente responde a la necesidad de autonomía en unas sociedades en continuo cambio, cuyos individuos deben poner en práctica constantemente sus conocimientos y su raciocinio para orientarse, pensar y actuar. A este proceso deben contribuir todos los momentos de la vida y todos los ámbitos de la actividad humana, a fin de que el desarrollo pleno del individuo coincida con la participación en la vida en sociedad. La educación, sin límites temporales ni espaciales, se convierte entonces en una dimensión de la vida misma.
5. La necesidad de la educación vitalicia
El ser humano tiene la capacidad de aprender a lo largo de toda la vida gracias a la plasticidad cerebral. En la sociedad actual se requiere un continuo esfuerzo de hacer uso de esa característica, debido a la frecuencia de mutaciones de una sociedad en constante cambio. Teniendo en cuenta la estructura laboral actual, en que la pirámide jerárquica ha quedado ‘achatada’, siendo más democrática a la hora de repartir responsabilidades, es necesario estar a la altura de asumir esas responsabilidades.
En los países en desarrollo es muy necesaria la educación básica como base y la educación permanente a desarrollar como principal arma para combatir la pobreza.
La educación a lo largo de la vida es, en definitiva una necesidad personal, familiar, social y laboral que nos identifica como seres humanos y que nos permite dejar nuestro legado a otras generaciones para que puedan seguir haciéndolo.
Referencias
1: -Organización de las naciones unidas para la Ciencia, la educación y la Cultura (s.d). Recuperado de: http://www.cinu.org.mx/onu/estructura/organismos/unesco.htm
2: -Biografía Jacque Delors(s.d). Recuperado de: http://www.biografiasyvidas.com/biografia/d/delors.htm
3: -15 años del informe Delors , Educacion, Mak Consultores.Recuperado de: http://www.gadeso.org/index.php?contenido_servicio_tabla=articulo_detalle&contenido_idarticulo=909
4: Delors, J. (1996) La educación encierra un tesoro. París: Santillana Ediciones Unesco.
5: -Aunión J. A. (2012) Artículo : ’La población adulta que estudia aumenta dos millones desde 2007’ Madrid: El País sección sociedad. Recuperado de:
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/12/16/actualidad/1355684044_499779.html
6: - Anónimo, (2010) Web presidencia república oriental del Uruguay. Recuperado de:
http://archivo.presidencia.gub.uy/sci/noticias/2010/11/2010111607.htm
7: Pérez Lozano, C. Artículo : ‘Los medios de comunicación como herramientas de aprendizaje’
ISEP Clínic Vitoria-Gasteiz. Recuperado de:
http://www.isepclinic.es/index.php?option=com_content&view=article&id=1577%3Alos-medios-de-comunicacion-como-herramientas-de-aprendizaje&catid=680%3Apsicopedagogia&Itemid=1147&lang=es
manera global, invitando a la reflexión sobre las funciones y estructuras internacionales, tratando de evitar la desigualdad entre países desarrollados y en desarrollo. Unificar todas las culturas distintas para que se enriquezcan y entiendan mutuamente y de esa manera comprender mejor nuestras propias culturas.